TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Honduras Es uno de los países con una amplia riqueza musical, desde los clásicos boleros, la música tradicional y la contagiosa música punta, ritmos hondureños Han salido a conquistar el mundo entero.
«Nunca» de Lidia Handal, «Sopa de caracol» de banda blanca, «Hojas secas» de diablos negros, y «Yo hablo español» de Polache, son sólo algunas de las canciones que muestran la trascendencia de los músicos hondureños a través de los años.
Desde la llegada de la música popular a Honduras, nuestros artistas se han adaptado a las tendencias musicales de cada época musical. En los años 60 y 70, con la explosión de boleros, baladas románticas y canciones tradicionales que permanecen en el imaginario hondureño hasta el día de hoy. En los años 80 y 90 el rock dominó el panorama nacional, con la aparición de bandas como Diablos negros y Delirio.
Además de música de vanguardia, influenciada por los ritmos garífunas del Caribe hondureño, que conquistó al mundo entero con el tema “Sopa de Caracol” de Banda Blanca y que contó con otros exponentes de gran éxito como Kazzabe Agrupación.
En los años 2000 abrazó como nunca la música alternativa y el pop, para dar paso al dominio total de la música urbana hasta la actualidad con figuras como Menor Menor, Los Bohemios y Polache.
Entre los grandes artistas de la música hondureña se encuentra Lidia Hándal. Fue una de las grandes compositoras con temas como “Jamás” y “El Bananero”. Nació en San Pedro Sula y desarrolló su carrera artística en Estados Unidos en la primera mitad del siglo XX. Por su estilo compositivo y trascendencia, es una de las artistas más respetadas del panorama.
Guillermo Anderson Es otro de los nombres grabados en oro en la música nacional. A lo largo de su carrera se destacó por su amor por Honduras, a través de sus canciones como “En mi país”, “El encarguito” y “Pobre Marinero”. Temas en los que relata muchas de las experiencias de los hondureños, y en los que aborda la inmigración, el trabajo en el campo y la importancia de la conservación de los recursos naturales.
El romanticismo tiene su máximo exponente con Moisés Canelo, el artista conocido como “La Voz de Oro de Honduras”, quien es recordado por temas como “Vaya Porque” y “Amor de mis amores”. Fue un gran vendedor de discos en los años 70 y 80.
Siempre de esta misma generación se destacan Pilo Tejeda y la Banda Blanca, quienes fueron los responsables de la canción más internacional que Honduras dio al mundo: “Sopa de caracol” que fue lanzada en 1991. Tal fue el éxito de la canción. Incluso lo presentaron en el Festival de Viña del Mar en 1992. Y fue un fenómeno bailable en países como México, Argentina y Estados Unidos.
Entre los exponentes de la música no puede quedar fuera Diablos Negros, la banda de rock más trascendental de Honduras y la región. Con temas como “Hojas Secas” y Tierra Suelta” marcaron generaciones desde finales de los ochenta hasta la actualidad. Recién en 2022 celebraron 40 años de trayectoria.
En los últimos años la sociedad hondureña ha vivido el fenómeno Polache, el trovador se destaca con una propuesta de llevar el argot hondureño a sus canciones. “Mira Honduras”, “Yo hablo español”, “No le pare pelota” fueron canciones populares que cantaron niños y adultos.
Actualmente, la música hondureña está representada por talentos como Menor Menor, Atomic Rose, Eduardo Umanzor y Chia Casanova, con géneros que van desde el pop alternativo y urbano.
El panorama musical nacional actual ha cambiado, según explica el productor musical Oliver Martínez. Atrás quedaron los años de edición y venta de álbumes, lo que hoy predomina es el streaming, afirma el productor.
Con el predominio de la música en plataformas de Internet, como Spotify o Apple Music, Martínez afirma que un cantante que quiere incursionar en la música lo primero que debe hacer es autogestionarse para que su catálogo llegue a estas aplicaciones lo antes posible.
Además, aconseja aprovechar la visibilidad que da YouTube, por lo que un vídeoclip sigue siendo una herramienta muy potente para cualquier artista.
Finalmente, asegura que no deben olvidar apostar por los shows en vivo, ya que es una gran oportunidad para que el artista conecte con el público y es la oportunidad de mostrar su talento en música inédita.