Los cuatro cadáveres de los jóvenes que desaparecieron tras un Moviente en Honduras residencial hacia el barrio Mirador de Oriente Fueron sacados del monte de Tatumbla y trasladado a Tegucigalpa.
El Subcomisario de la Policía Nacional, Juan SabillónIndicó que los dos primeros cuerpos ya se encuentran en la morgue del Ministerio Público (MP) luego será trasladado por vía aérea. Luego sacaron a los otros dos. La búsqueda del quinto joven desaparecido aún continúa.
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Juntos, a menos de un metro de distancia, medio cubiertos de ramas y hojas, los cuerpos sin vida de Roger Coleman (24) y Annie Villatoro (30).
La pareja que había desaparecido hace seis días tras mudarse de Residencial Honduras a la colonia Mirador de Oriente junto con otros tres amigos fue encontrada en una zona montañosa.
En el momento del hallazgo, Annie Villatoro (30) vestía de negro y su marido Roger Coleman (24) vestía una camiseta aparentemente amarilla.
El estado de descomposición de los cuerpos no permitió detallar cómo fueron asesinados, sólo que fueron obligados a caminar un trayecto de dos horas para ser ejecutados.
Los cuerpos de los otros dos niños fueron encontrados a una hora de donde la pareja cruza un río. No se puede determinar si se trata de los restos de Elvin Izaguirre (20), Kenneth Cruz (20) o Alejandro Aceituno (26). Las autoridades indicaron que la identificación forense se encuentra en proceso.
Anoche, al confirmarse la muerte de los jóvenes, Héctor SánchezEl Ministro de Seguridad, informó que el lunes capturaron a dos mujeres y tres hombres, y les encontraron en posesión de un teléfono celular de los secuestrados y la llave del vehículo de los menores.
El vehículo en el que transportaban sus pertenencias fue encontrado abandonado en un tramo de la colonia Villa Nueva horas después de su desaparición. Sánchez dijo que los jóvenes eran buena gente, que solo buscaban una casa para alquilar, pero pandilleros de la 18° Policía querían apoderarse de la casa.
El informe preliminar indica que los cinco jóvenes fueron avistados por miembros de la Banda 18 Mientras se desplazaban, los pandilleros esperaban el momento oportuno para secuestrarlos y llevarlos a un destino desconocido, donde les quitaron la vida.