En Tegucigalpa, una delegación de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) acudió al Congreso Nacional con el propósito de presentar y justificar las necesidades presupuestales de la institución para el año 2025. Durante la reunión, encabezada por el rector Odir Fernández, el importancia de asegurar un financiamiento adecuado para preservar la calidad educativa y mantener las operaciones de la máxima institución educativa del país.
Fernández destacó que el principal objetivo de la reunión con la Comisión de Presupuesto fue resaltar las limitaciones económicas de la universidad y la urgente necesidad de fortalecimiento financiero. Según el rector, la falta de recursos suficientes compromete la capacidad de la UNAH para cumplir con sus objetivos académicos y administrativos. «Es crucial que las necesidades planteadas sean cubiertas, de lo contrario será difícil alcanzar los objetivos establecidos y garantizar el actual nivel de funcionamiento de nuestra institución», advirtió.
Actualmente la UNAH opera con un presupuesto asignado para 2024 de 6,491 millones de lempiras. Sin embargo, la situación financiera empeora porque la Secretaría de Hacienda aún le debe más de 2,000 millones de lempiras a la universidad. Este retraso en los desembolsos no sólo pone en riesgo las operaciones diarias, sino que también dificulta la planificación de proyectos a largo plazo. Pese a estas dificultades, Fernández aseguró que buscará gestionar un aumento del presupuesto para 2025, al considerar que los recursos actuales no son suficientes para atender las crecientes demandas de la institución.
El rector enfatizó que la posición de la universidad no debe ser la de pedir menos de lo que establece el reglamento, que establece que la educación superior debe recibir al menos el 6% del presupuesto nacional. «El error sería pedir menos de lo que corresponde, porque la ley nos avala. De hecho, el porcentaje debería ser mayor, pero lamentablemente en nuestro país las prioridades presupuestarias suelen centrarse en áreas como seguridad y armamento, dejando de lado la educación», lamentó Fernández.
A pesar de los desafíos y obstáculos financieros que enfrenta la educación superior en Honduras, el rector expresó su compromiso de seguir trabajando por la universidad. Según él, la institución continuará implementando proyectos clave hasta 2025, en el afán de cumplir su misión educativa y contribuir al desarrollo del país.
